martes, 24 de julio de 2018

Los lotófagos



El sacerdote enjuagaba el cáliz: luego se echo adentro los restos limpiamente. Vino. Hace más aristocrático que por ejemplo si bebiera lo que ellos están acostumbrados, cerveza Guinness o alguna bebida no alcoholica en bitter Wheatley de Dublín o el ginger ale (aromático) de Cantrell y Cochrane. No les da nada de él:Vino de presentación: sólo lo otro. Triste consuelo. Piadoso engaño pero con mucha razón: sino no harían más que venir viejos borrachos a cual peor, a echar un trago. Es extraño toda esta atmósfera del. Muy bien. Perfectamente bien, eso es.

Ulises.
Capítulo 5 -Los lotófagos.
                       James Joyce.

No hay comentarios: